Flores y Tamales
Los que estaban
en el frente empezaron a titubear. Los buitres más
asquerosos babeaban en sus pezuñas, calibrando la violencia con la que desgajar
a sus víctimas. No fuera a ser que los viesen….
Yo no soy el asesino , dijo la puta maricona . Mi
misión es hacer cumplir la ley a quienes la pierden , o a quienes la desobedecen. Ese es el equilibrio. Tú me tienes miedo, y yo
hago lo que pueda para que me
lo tengas .
Y dejaremos de un lado el sentido común
y ese tufillo de que alguna cosa estamos
haciendo mal. Y la humanidad, y el respeto a lo que otros piensan….
¡ Qué coño!, ¡Que les den!. ¿ Que necesidad tengo de
ser justo si sin serlo voy ganando?.
El emperador reclama lealtad a su séquito y a éste se la pone dura
su inmenso poder. Te perdono este primer titubeo porque aún no te veo tan débil como para atreverme a joderte.-
Pero recuerda que me llaman buitre y bajo mi
apariencia de mojigata temerosa de Dios,
cumplo las órdenes de la jungla, ser el rey aunque me sigan muchos pero no me quiera nadie
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